Mensaje de reconocimiento de Helen Duffy en el 25 aniversario de la orden de captura contra Augusto Pinochet

Muchos de nosotros, con cierta edad, recordamos que hoy hace 25 años, 16 de octubre de 1998, el juez Baltasar Garzón emitió la orden de captura contra Augusto Pinochet y solicitó la extradición del ex dictador desde Londres. Un momento histórico y enormemente prometedor para la justicia internacional. 

Trabajé en los procedimientos de Pinochet para Human Rights Watch en Londres (con Reed Bródy y @PhillipeSands). Nos hubiéramos quedado incrédulos entonces si alguien nos hubiera dicho que una década después el mismo juez Garzón sería destituido de la magistratura y puesto en el banquillo de los acusados por ejercer su función judicial en otros casos relacionados con delitos cometidos por entidades poderosas en España, o que me encontraría representándolo como víctima en su propio caso de derechos humanos contra España. Tampoco habría creído posible que, si un ataque tan flagrante a la independencia judicial tuviera lugar en Europa y fuera denunciado, como ocurrió en la poderosa decisión del Comité de Derechos Humanos de la ONU de 2021 Garzón contra España, que encontró múltiples violaciones de sus derechos, España pudiera simplemente ignorar la decisión, con aparente impunidad. Pero ahí es donde estamos: https://rb.gy/1197q.
El caso Pinochet no habría ocurrido sin jueces independientes y valientes en Madrid y Londres. Si alguna vez se rinden cuentas por los atroces ciclos de violaciones e impunidad que estamos viendo hoy en día en todo el mundo, lo más probable es que sea por parte de un poder judicial nacional fuerte e independiente. Si estamos comprometidos con la justicia internacional, es fundamental que los ataques a la independencia judicial, en España y en todo el mundo, se tomen más en serio.