Garzón: «El proceso sanador de la memoria cuesta muy poco»

Artículo publicado en Laprovincia.es______

«El proceso sanador de la justicia, de la memoria y de la verdad cuesta muy poco», aseguró el jueves Baltasar Garzón ante un auditorio con más de 400 personas en el hotel Reina Isabel de Las Palmas de Gran Canaria, en un acto organizado por Democracia Canarias XXI. El exmagistrado de la Audiencia Nacional y reconocido jurista, que disculpó la ausencia de la Fiscal de Derechos Humanos y Memoria Democrática, Dolores Delgado, por motivos de trabajo en Madrid, fue presentado por el ministro Ángel Víctor Torres, ante la plana mayor del socialismo grancanario y la cúpula de Nueva Canarias, entre otras personalidades de la vida social, académica, empresarial y sindical.

En la intervención inicial, Ángel Víctor Torres aprovechó para anunciar la próxima efeméride del aniversario de la muerte de Franco, el próximo 20 de noviembre, que el Gobierno de España dedicará a celebrar «los 50 años del comienzo de la recuperación de la Democracia». «Del comienzo», insistió el líder socialista canario, que dio por asentada la democracia en España «pero con amenazas». El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática señaló que será declarado como Lugar de Memoria el campo de trabajo de Tefía, en Fuerteventura, donde se encerraba a homosexuales, y que se convertirá en centro de interpretación de la represión franquista. También anunció que antes de final del año será la “resignificación del Valle de Cuelgamuros”, después de un concurso internacional y el empeño del Ejecutivo de Pedro Sánchez de identificar a 30.000 víctimas cuyos restos están conservados en cajas. «Los dictadores merecen y tienen que ser procesados», remarcó Ángel Víctor Torres, con referencias a su reciente viaje a Chile y Argentina, para dar la palabra a Baltasar Garzón.

El exmagistrado definió como «esencial para la convivencia» la memoria democrática, aunque para algunos pueda parecer secundario. «Y no es pasado», subrayó. Tras criticar a Donald Trump y advertir la crisis de la estructura internacional del Derecho, admitió que «algo no estamos haciendo bien», a la vista del auge de la extrema derecha y de los comportamientos de los jóvenes con las ideas reaccionarias. «La extrema derecha cada vez está más arriba en Europa», dijo Garzón. «Tenemos que explicar obviedades. ¿Por qué un 20% cree que la dictadura es mejor que la democracia?»

De su experiencia, Garzón destacó que no había conocido en ninguna víctima de las dictaduras, aquí y al otro lado del Atlántico, «una expresión de venganza». «Lo único que han pedido es justicia», remarcó antes de pasar a poner en cuestión el papel del Consejo General del Poder Judicial y de los tribunales de justicia en los procesos de memoria. Garzón, pese a que los hechos penales «han prescrito», acusó a sus antiguos compañeros de carrera de tener «proscrita la memoria» y «miedo en los genes con una posición de rechazo» a los asuntos de la dictadura. «Todavía en el Poder Judicial cuesta Dios y ayuda arrancar algún tipo de acción», que, añadió, «se consigue en España a golpe de piñón de este Gobierno».

«La justicia que no sirve a los ciudadanos, no sirve», agregó. «Los procesos de memoria no son políticos. Simplemente es voluntad de cumplir la ley». A lo que, dijo, se opone Isabel Díaz Ayuso al negar la condición de Lugar de Memoria a la Real Casa de Correos, Dirección General de Seguridad franquista, y hoy sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid.